LLAMADO A LA ACCIÓN CONJUNTA PARA DETENER LAS EJECUCIONES RELACIONADAS CON LAS DROGAS EN IRÁN

10 de abril de 2024 – La pena de muerte, o asesinato estatal, es la herramienta más importante de la República Islámica para infundir temor social y mantener el poder. Las ejecuciones en Irán aumentaron drásticamente tras el levantamiento « Mujer, Vida, Libertad », con al menos 834 personas ejecutadas en 2023.

En 2023, más de la mitad de todas las ejecuciones registradas en Irán se debieron a cargos relacionados con las drogas. Al menos 471 personas fueron ejecutadas sin ningún tipo de reacción o costo político para la República Islámica. La mayoría de los ejecutados proceden de comunidades desfavorecidas y marginadas. El número de ejecuciones llevadas a cabo en las regiones étnicas, en particular las kurdas y baluchis, es desproporcionadamente alto en comparación con su población. En 2023, un tercio de los ejecutados por cargos relacionados con las drogas eran de etnia baluch.

Los acusados de tráfico de drogas son condenados a muerte por tribunales revolucionarios basándose en confesiones obtenidas mediante tortura, sin el debido proceso ni derecho a un juicio justo, y a menudo sin acceso a un abogado.

Las ejecuciones relacionadas con las drogas no han recibido una reacción internacional adecuada y su aplicación diaria se encuentra con el silencio de los medios de comunicación. Esto ha llevado a que las autoridades realicen 18 veces más ejecuciones relacionadas con las drogas en 2023 en comparación con 2020, con el menor costo político.

Por otra parte, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), que coopera con Irán en la lucha contra el tráfico de drogas, no solo ha guardado silencio sobre el fuerte aumento de las ejecuciones relacionadas con las drogas, sino que también firmó un nuevo acuerdo con la República Islámica en mayo de 2023. Además de legitimar el uso de la pena de muerte por parte del Estado, esta cooperación también conduce a un mayor número de ejecuciones mediante la ayuda financiera y el equipo.

Nos preocupa que cientos de personas más sean ejecutadas en los próximos meses si no aumentamos el costo político de estas ejecuciones para la República Islámica. Hacemos un llamamiento a todas las organizaciones de derechos humanos y activistas para que participen en una campaña mundial especial para detener las ejecuciones relacionadas con las drogas en Irán.

El objetivo de la campaña es hacer eco de la voz de las víctimas más silenciadas de la máquina de ejecución e intimidación de la República Islámica. También instamos a la UNODC a que condicione cualquier cooperación con la República Islámica a la suspensión total de las ejecuciones relacionadas con las drogas.